Hoy os voy a dejar por aquí, los dos últimos párrafos que he escrito en el capítulo 16, del cual no me queda mucho para acabarlo y me gustaría compartirlo con quien le apetezca leerlo. Ahí va:
Andréi le mantuvo durante unos segundos la mirada de Alex, hasta que un nuevo grito llamo su atención evitando que siguiera la discusión. — ¿Y qué es lo próximo que debemos hacer? ¿Cortarle un dedo? ¿La lengua? ¿Sacarle un ojo? Eh, dime. ¿Vamos a tener que torturarlo? ¿Hasta cuándo estará aquí retenido?
— ¡HASTA QUE NOS LO DIGAN, PEDAZO DE GILIPOLLAS! — Aclaró Alex pegándole un fuerte puñetazo en la cara haciéndole retroceder varios pasos hasta darse con el pico de una mesa. Algo aturdido por el golpe, Andréi salió de la villa pegando un fuerte portazo, dejando a Alex allí solo. Aceptar aquel trabajo fue un tremendo error por su parte. — Nunca debí hacer negocios con Alex. — susurró enfadado consigo mismo saliendo de la villa. En el interior, se escuchó como algo de cristal se rompía en mil pedazos.
Creo que por esta tarde ya he escrito bastante. Ahora voy a darme un pequeño descanso y seguramente, esta tarde/noche continuare. Con un poco de suerte, hoy termino el capítulo.
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