... hoy domingo, día de descanso (Para mi) dentro de mis turnos rotativos de mañana, tarde y noche, en el trabajo, he aprovechado que hacia buena mañana para bajar a hacer algo de lo que espero no tener que dejarlo nunca. Bajarme a la terraza de un bar y disfrutar de un café bombón acompañado de una buena lectura, en este caso "El ultimo hogar" de Rafael Mérida (Un buen amigo).
Esa media horita de lectura, es realmente reparadora, mas que para mi cuerpo (que no) para mi mente. Es el momento del día, donde mas puedo desconectar de la rutina y disfrutar ese corto espacio de tiempo para mi mismo. No hay preocupaciones, no hay problemas, todo se para a mi alrededor. Todos en mayor o menor medida conocéis esa sensación de refugio en vosotros mismos. Pues, esa es mi vía de escape de la monotonía.
Cierto es que en casa cuando leo también me evado de la realidad durante un rato, pero no es lo mismo. No disfruto la lectura de la misma forma que haciéndolo al aire libre.
Y por eso, espero que esta buena costumbre no se me vaya nunca, porque mientras hayan libros que leer y terrazas que conquistar, aquí, el menda, seguirá con su extraña costumbre para muchos y mas común para otros.
Saber de alguien que disfruta la lectura, es algo bueno, porque con tantos medios, la lectura ha quedado relegada. Por cierto, me gustaría saber si te gustaría leer cuentos. si es así, por favor avísame.
ResponderEliminarSaludos desde Brasil
Gracias por tu comentario. Pues sinceramente, nunca me ha dado por iniciarme en el mundo de los cuentos. Un saludo desde España.
ResponderEliminarYo leo menos de lo que querría pero al menos no pierdo la costumbre.
ResponderEliminarNo siempre la vida nos permite disfrutar del tiempo como quisiéramos. Lo importante es, como tu muy bien dices, no perder la costumbre.
ResponderEliminar